03 de Octubre de 2006 - 21 hs.
Tema: "Educación en Valores"


Conducido por el Bioquímico Alberto Sebastián Parera, siendo acompañado por los integrantes del Centro de Investigación para la Paz de la Facultad Regional Resistencia, Universidad Tecnológica Nacional, Abogado Raúl Arce, Srta. Francisca Ortiz y Srta. Mirta Delgado y Magíster Miguel Armando Garrido.

Operador: Guillermo Aguilar

Temas: Educación en Valores

El tema ha sido tratado siguiendo los lineamientos de la Enciclopedia de Paz y Conflictos, dirigido por el Dr. Mario López Martinez, del Instituto de Paz y Conflictos de la Universidad de Granada. España.

¿EN QUÉ SE FUNDAMENTA LA EDUCACIÓN?
Toda Educación se fundamenta en Valores, por cuanto Educar es siempre perfeccionar, optimizar, completar, mejorar ……, en definitiva, hacer más valioso al Ser Humano. Es, pues, una reiteración la expresión EDUCACION EN VALORES, ya que no es posible Educar más que en Valores.
A nadie se le ocurre calificar de Educativa la acción de robar, mentir, matar, la violencia o la discriminación. Lo antivalioso, en cuanto mal, y por lo mismo, siempre es antieducativo. El Valor de la Educación radica justamente en los Valores que ésta Cultiva, pues una Educación sin Valores es una Educación sin Valor, una Educación imposible de realizar, por cuanto no merece el nombre de Educación.

¿QUÉ SIGNIFICA EDUCAR?
Educar, pues, es siempre incorporar Valores a la propia existencia. El nacimiento nos da el Ser, pero tenemos que construir EL NUEVO Y MEJOR MODO DE SER , pues nacemos humanos, pero no humanizados; personas, pero no personalizados; sociales, pero no socializados. Este Proceso de Humanización, Personalización y Socialización sólo es posible a través de Valores que se adquieren mediante la Educación.
Valores siempre acordes con el perfeccionamiento de la naturaleza humana en su conjunto, pues una Educación parcial, que olvidase el Cultivo de alguna dimensión humana fundamental, por su carencia, dejaría de ser una Educación de Calidad.
La Educación, pues, conlleva siempre una relación explícita o implícita al Valor, por cuanto no es posible llevar a término el más mínimo acto educativo sin alguna referencia a un conjunto de Valores. Y ello es así, por cuanto la Educación en su misma esencia y fundamento es valioso. Por lo que no puede separarse el valor de la Educación como no puede separarse el cuerpo de la mente del Ser Humano. Una Educación sin Valores no es posible, ni deseable. Siempre la Educación buscará el bien, la perfección y la optimización. Las divergencias surgirán al delimitar el contenido concreto de tal perfección u optimización: ¿qué valores, qué sentido y qué orden jerárquico fundamentan la Educación, o la mejor Educación?

LA RAZÓN ES DÉBIL ANTE LA AXIOLOGÍA (VALORES)
La Ciencia y la Tecnología sólo logran explicar parte de lo que es el Hombre, pero nada dicen –porque nada pueden decir- sobre el Sentido de la Vida, el Deber-Ser, la Libertad, el Bien, o el Mejor Valor …… El Ser Humano, además de Ciencia y Razón, es Afecto y Pasión, por lo que andamos hambrientos de afecto no menos que de comida, bebida o sexo. LA RAZÓN ES DÉBIL ANTE LA AXIOLOGÍA, por eso somos singulares y libres para optar ante la pluralidad.

EDUCACION INTEGRAL
El “valer” o la Bondad de los Valores hace que el Ser Humano desee “el Cultivo” y la posesión de todos, o al menos del mayor número posible de ellos, pues el Ser Humano anda siempre hambriento del bien. La expresión EDUCACION INTEGRAL, aunque puede interpretarse en sentidos muy variados, todos ellos incluyen el concepto de totalidad: la Educación del Hombre completo, todas y cada una de sus facultades y dimensiones. La carencia de este sentido Integrador conduce a la parcialidad o el Desarrollo Unilateral, situaciones ambas atentatorias contra el Desarrollo Armónico de la Persona. Tales deficiencias son hoy rechazadas en los documentos legislativos, nacionales e internacionales, que proclaman la Necesidad de la Educación Integral: Declaración Universal de los Derechos Humanos (10-XII-1948).

¿QUÉ ES EL VALOR?
De modo genérico, podemos definir el Valor COMO LO QUE VALE, LO QUE ES IMPORTANTE, aquello que llama nuestra atención POR SU BONDAD, algo que suscita preferencia.
El Valor, pues, es lo opuesto al pasotismo, a la indiferencia o al aburrimiento.
Los Valores se encuentran encarnados en las realidades valiosas, son realidades presentes en nuestra vida y en la cultura. Desde ellos pensamos, actuamos, decidimos, explicamos y damos coherencia a nuestra vida. En opinión de Ortega y Gasset, los Valores son “un linaje peculiar de objetos irreales que residen en los objetos reales o cosas, como cualidades sui generis”, tal es el caso de la belleza de una estatua, la justicia de un acto, la verdad de un discurso.
Por nuestra parte, hemos definido el Valor como “UNA CUALIDAD IDEAL, DESEADA O DESEABLE POR SU BONDAD, CUYA FUERZA ESTIMATIVA ORIENTA LA VIDA HUMANA”. Con esta definición de Valor afirmamos la dimensión ideal y real del Valor, así como su vinculación con la Naturaleza Humana, pues un Valor no tiene sentido en la Educación si carece de vinculación con el Ser Humano.

EL VALOR POSEE UN COMPONENTE EMOCIONAL Y OTRO INTELECTUAL
El Valor, pues, en cuanto algo conocido y apetecible como bueno, posee un componente Emocional y otro Intelectual. El Conocimiento precede y es necesario, pero no suficiente. Si no hay sentimiento no se da la Valoración. Ni el emotivismo radical, ni el racionalismo absoluto son buenos “conocedores” del Valor, pues, en su captación, los sentimientos no son totalmente ciegos ante la razón, ni el conocimiento intelectual es ajeno a la afectividad. El “flechazo” o el enamoramiento, aunque con un fuerte predominio emocional, no es exclusivamente afectivo.
NADIE AMA LO QUE NO CONOCE; aunque no por conocer algo o a alguien, se le ama.
No hay nada en el entendimiento que previamente no haya pasado por los sentidos. Lo conocido debe ser apacible para que llegue a ser Valor. Valor es, pues, el bien conocido como apetecible.

¿POR QUÉ LOS VALORES SE PRESENTAN CONFLICTIVOS?
No siempre, sin embargo, lo conocido es conveniente o apetecido por todos, por lo que los Valores se presentan positivamente conflictivos. El problema o conflictos de Valores reside en la FALTA DE CONTUNDENCIA RACIONAL, es decir, que LA RAZÓN ES FLACA O DÉBIL ANTE SU JUSTIFICACIÓN. Andamos “DESNUDOS DE RAZÓN” ANTE LOS VALORES SUPERIORES. Gracias a esta “desnudez” somos libres.
El acuerdo ante el Conocimiento Científico –análisis químico de agua, dilación de los cuerpos o la circulación de la sangre- se torna discrepante ante el Conocimiento Axiológico. Nadie discute ante la pregunta: ¿qué es el cuarzo, la pirita, o la solución de un problema matemático. La certeza, lo que es, se impone tras su estudio o análisis. No así ante la pregunta ¿quién es el hombre?, ¿qué es una sociedad, la familia?, o ¿qué religión o grupo político es mejor? O no hay razones o hay tantas razones para unos y para otros, que nos movemos en la duda o caminamos entre inseguridades, o bien las seguridades son siempre personales, o de grupo. Gracias a los Valores gozamos de Subjetividad y, en consecuencia, de pluralidad y de libertad.

MODELO ANTROPOLÓGICO Y JERARQUIA DE VALORES
La opción por unos u otros Valores, así como su Jerarquía u orden preferencial, determinan diversos Modelos Antropológicos, Educativos, Políticos, Sindicales, Religiosos, etc., pues aunque todos los Valores valen, no todos valen lo mismo para todos. En este conjunto amplio de VALORES, hemos de distinguir los VALORES HUMANOS (cualquiera de los relacionados con alguna Dimensión de la Persona), los VALORES DOBLEMENTE HUMANOS O REDUPLICATIVAMENTE HUMANOS (aquellos que se alejan de los animales, y se refieren a lo más Humano de los Humanos, a la Persona en cuanto Persona)
Así pues, aunque todos los Valores en algún sentido son importantes, no todos lo son con la misma urgencia, pues unos son más necesarios (los Valores Inferiores: comida, bebida, higiene, descanso) y otros son más dignos (Valores Superiores: estéticos, éticos y, para muchos, religiosos). Unos son más altos en cuanto a su dignidad, y los otros prioritarios en cuanto a su necesidad, aunque la prioridad en la vivencia en modo alguno contradice la dignidad.
La Educación, en consecuencia, además de ocuparse de QUÉ VALORES HA DE IMPULSAR, jamás podrá olvidar LA JERARQUÍA DE LOS MISMOS, aquellos que afectan a la Necesidad y a la Dignidad, esto es, los que son PRIORITARIOS EN EL DESARROLLO HUMANO, ya que una persona hambrienta y enferma, difícilmente podrá Cultivar los Valores Superiores. “Primero vivir y después filosofar”, afirmó Platón. De este modo, la problemática Axiológica se torna problemáticamente Educativa, según la importancia asignada a unos u otros Valores, pues, si bien es verdad, que el Cultivo de los Valores Superiores sólo es posible cuando se han cubierto los Inferiores, no es menos cierto, que la fuerza de los Valores de uno y otro campo es diversa.

MODELO DE DESARROLLO - MODELO DIRECTIVO
MODELO DE INTEGRACION
Esta libertad de opciones ante el bien –o lo mejor- se refleja en la Pluralidad de Modelos Antropológicos y Educativos. Todo problema Educativo es, en el fondo, un problema Axiológico: si el Valor radica en el Hombre o fuera de él, si el Hombre crea el Valor o lo descubre, nos conduce a un subjetivismo u objetivismo Axiológico, o bien a una Visión Integradora y, desde estos fundamentos, a otros fundamentos Educativos.
MODELO DE DESARROLLO: Si los VALORES SUBJETIVOS, la Educación caminará cercana al significado etimológico de EDUCERE: SACAR, EXTRAER, DAR A LUZ, etc. Y, en consecuencia, a un Modelo de Desarrollo, en el sentido teleológico de dentro a fuera, en el cual la Educación se orienta a la estimulación de las Potencialidades del Educando, hacia una Educación No Directiva, basada más en la libertad, autonomía, “laissez-faire” y creatividad.
MODELO DIRECTIVO: Por el contrario, si los VALORES SON OBJETIVOS, la Educación seguirá más los pasos del significado etimológico de EDUCARE, esto es DE CONDUCIR, GUIAR, ORIENTAR…. conducentes a un Modelo Directivo, en el sentido teleológico de fuera hacia adentro, en el que se pretende llevar al sujeto hacia la meta Valiosa previamente determinada. En este proceso, la autoridad, disciplina, instrucción y receptividad son aspectos connaturales al mismo.
MODELO DE INTEGRACION: Y si los VALORES poseen una DIMENSION SUBJETIVA y otra OBJETIVA, la Educación seguirá los mismos pasos conducentes a un Modelo de Integración en el que, de modo ecléctico, RELACIONA “EDUCARE” Y “EDUCERE”, DIRECCION Y DESARROLLO.

¿CUÁLES SON LOS PRINCIPIOS PARA LA EDUCACIÓN EN VALORES?
Enumeramos algunos Principios u Orientaciones, de interés para la Educación en Valores: 1.- La valiosidad de los Valores se muestra (ejemplos) y se demuestra (razones). 2.- La fuerza de los Valores consiste en convencer, no en vencer. 3.- Los Valores se aprenden por contagio en el ambiente. 4.- Los Valores se proponen, no se imponen. 5.- En el Aprendizaje de los Valores el “como” es superior al “qué”. 6.- No es posible la Educación en Valores sin la adhesión interior del Educando. 7.- No siempre que se viven valores, se Educa en Valores. 8.- Obligar a vivir Valores es tan ilógico como obligar a un sordo a oír o a un ciego a ver. 9.- Los Valores se presentan y vivencian en la Cooperación, no en la Competencia. 10.- Para Educar en Valores es necesario, además de querer (buena voluntad), saber-hacer (conocimiento).

“Algunos autores hablan de Pax Sumérica al referirse a los cerca de 700 años que Uruk la primera ciudad sumeria y probablemente humana, vivió sin conocer ningún conflicto bélico. Todo lo cual es de muy alto interés porque estos momentos de máximo esplendor, cuando nació la ciudad, el urbanismo, la“civilización” y la escritura, estuvieron presididos por unas relaciones
pacíficas”
Manual de Paz y Conflictos. Beatriz Molina Rueda y Francisco A. Muñoz
(eds.).

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